Detectan en Chiapas a grupos subversivos


Martín Morita

Agencia Reforma

http://www.reforma.com/

La posibilidad de enfrentar una movilización armada en Chiapas ha encendido la luz de alerta de las autoridades.

De acuerdo con una investigación oficial realizada por las policías federal y estatal, células de grupos subversivos buscan desestabilizar al Gobierno local perredista de Juan Sabines mediante la vía armada, concretamente durante las celebraciones del Bicentenario de la Independencia en el 2010.

El informe de inteligencia al que REFORMA tuvo acceso, advierte que grupos afines al Ejército Popular Revolucionario (EPR), Fuerzas Armadas Revolucionarias del Pueblo (FARP), Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI), entre otros, se han armado ayudados por miembros del crimen organizado.

Como ejemplo de este suministro de armas, la autoridad señala que José María Hernández Martínez, "El Chema", fue detenido el 30 de septiembre en el Municipio de Venustiano Carranza.

Al fundador y líder histórico de la Organización Campesina Emiliano Zapata (OCEZ) se le vincula con el aseguramiento de un arsenal el 11 de octubre en un rancho en el Municipio de Frontera Comalapa, y que contenía lanzagranadas, más de 500 granadas útiles, fusiles, ametralladoras y miles de cartuchos de varios calibres.

La investigación oficial señala a Hernández Martínez como dirigente del EPR en Chiapas y de tener vínculos con los Zetas.

También se cita el caso de dos granadas de fragmentación halladas el 22 de octubre en el estacionamiento del DIF estatal en Tuxtla Gutiérrez.

Primeras acciones

Como parte del trabajo de inteligencia, emprendida por los Gobiernos estatal y federal, y que apunta hacia un resurgimiento de células de grupos subversivos en Chiapas, se hace notar que algunos de esos grupos ya han emprendido las primeras acciones, consideradas como "terroristas" y que pretenden desestabilizar a esta entidad.

Se cita el caso de dos granadas de fragmentación halladas, el pasado 22 de octubre, en el estacionamiento del DIF estatal en Tuxtla Gutiérrez.

"Las primeras líneas de investigación apuntan a que ese acto terrorista habría sido orquestado por dirigentes de la Organización Campesina Emiliano Zapata (OCEZ) y del denominado Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (FNLS), como una medida de reacción ante las recientes detenciones de algunos de sus líderes", afirmó un alto funcionario del Gobierno estatal y quien participa en el equipo que lleva al cabo la investigación, en coordinación con el Gobierno federal.

El pasado 30 de septiembre fue detenido José María Hernández Martínez, mejor conocido como "El Chema", fundador y líder histórico de la OCEZ.

El 24 de octubre también fueron detenidos Roselio Cruz González y José Manuel de la Torre Hernández, también miembros de la OCEZ.

A los tres se les acusa de usar la organización social para distribuir armas y drogas.

En este sentido, REFORMA tuvo acceso a otro documento de inteligencia en el que se afirma que mandos policiacos, tanto estatales como federales, así como funcionarios de los tres niveles de Gobierno han recibido amenazas de muerte y amagos de que habrán incursiones violentas en varias zonas de Chiapas.

"A través de pintas en edificios públicos, cartas anónimas y por medio del internet, esos grupos subversivos han amenazado con insistencia que muchos militares, policías, Alcaldes y funcionarios pagarán con sus vidas el supuesto daño que le han causado", refiere textualmente una parte del documento.

Contrainsurgencia en Chiapas y Guerrero

10-noviembre-2009

http://blogs.eluniversal.com.mx/weblogs_detalle9173.html

Los medios no lo han reflejado a cabalidad, pero la última semana ha sido intensa en actividad contrainsurgente. Chiapas y Guerrero han sido los polos de atención.

Desde hace una semana se registra intensa movilización policiaca y militar en la zona de La Montaña de Guerrero, de donde entran y salen tropas, helicópteros y aviones, en lo que se supone es un operativo anti-narcóticos, pero que se sabe que tiene alta carga de búsqueda de guerrilleros, principalmente de la dirigencia del Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI).

Tan es así que desde el jueves corren rumores de la muerte de Omar Guerrero Solís, el “comandante Ramiro”, cabeza visible de los erpistas. La noticia no ha sido confirmada por ninguna autoridad, mantiene a la prensa local en vilo, y de paso sirve de elemento de tensión en las regiones de la zona, atemorizadas por tanto operativo.

Uno supondría que de haber cazado a Ramiro, las policías habrían hecho el anuncio de inmediato, para acreditarse el logro.

Una vez que termine la fase más fuerte del operativo concentrado en lo que la milicia llama la zona táctica Sierra 9, comenzarán a surgir testimonios de lo que han estado haciendo militares y federales allá arriba, en la montaña. Por experiencia sabemos que nunca son buenas noticias para los derechos humanos.

En Chiapas, por su parte, además de las ya comentadas detenciones de dirigentes de la Organización Campesina Emiliano Zapata (OCEZ), de la región Venustiano Carranza, por estar supuestamente vinculados a grupos de narcotraficantes y secuestradores, ayer nos desayunamos (literalmente) con la noticia de que un informe oficial de inteligencia advierte que grupos afines al EPR, a las FARP y al ERPI, estarían recibiendo el apoyo de grupos del crimen organizado como Los Zetas, brazo armado del Cártel del Golfo, y del Cartel de Sinaloa, que comanda Joaquín El Chapo Guzmán, para conseguir armamento de alto poder.

Según el reporte que dicen tener en el periódico Reforma “los grupos pretenden llevar al cabo acciones tendientes a desestabilizar, mediante la vía armada, al gobierno del perredista Juan Sabines en el 2010, concretamente durante las celebraciones del Bicentenario de la Independencia.

“Los sistemas de inteligencia (estatal y federal) han documentado un movimiento inusual de tráfico de armas de alto calibre en la frontera con Guatemala y en la zona de los Altos de Chiapas. Se ha confirmado que la mayor parte de ese arsenal se destina, o por lo menos se pretende, a células de grupos subversivos plenamente identificados”, señala el informe.

Surgen entonces varias preguntas que autoridades y grupos armados deben responder:

1.- ¿EPR, FARP y ERPI, trabajan juntos en Chiapas? Habrían logrado la unidad guerrillera más fuerte de la historia reciente del país, lo que hasta hace unos días parecía una posibilidad muy lejana. Improbable, aunque no imposible.

2.- ¿Qué ganarían el Chapo Guzmán y el cártel del Golfo apoyando guerrilleros? Quizá agregar un foco rojo en el mapa de la seguridad nacional, dirían algunos, abriendo un frente más al gobierno federal.

3.- Pero, ¿los de Sinaloa y los de los Beltrán Leyva dejaron de lado sus diferencias –las que han causado más de 6 mil muertos este año- sólo para apoyar guerrilleros? Suena loco.

4.- El informe alude a Los Zetas como brazo armado del cártel del Golfo, cuando hace dos años que dejaron de ser aliados. ¿Entonces?

5.- ¿Las guerrillas mexicanas ya desistieron de recatos morales y aceptan dinero del crimen organizado? Ha pasado anteriormente en la historia de la guerrilla en América Latina y México, aunque su discurso reciente van en sentido contrario.

6.- Tanto tráfico de armas de alto poder, tanta unión de subversivos, un inédito lazo narco-guerrillero… ¿sólo para desestabilizar al gobernador Sabines? Suena desproporcionado.

En este contexto, adquiere sentido el último comunicado del EPR, difundido el pasado 2 de noviembre, en el que se advierte que “a los opositores del régimen y a los revolucionarios se nos pretende juzgar por nuestros ideales fabricando delitos del fuero federal, vincularnos al crimen organizado al mismo tiempo que ser acusados de rebelión o motín, sin que quede asentado que el verdadero motivo es político, es decir, estar en desacuerdo con las políticas neoliberales, el gobierno ilegítimo y el régimen neoliberal (…) El fantasma del estallido social es pretexto de “tomar estas providencias” de parte del gobierno calderonista (…)”.

El nexo de guerrilleros con narcotraficantes no es un asunto anecdótico. Las oficinas de inteligencia y seguridad nacional deben ser serias al respecto. No había pasado antes en México; salvo indirectos acuerdos de paso o compartición de territorios. Si es real, estamos ante un paso adelante en la colombianización de nuestros grupos armados, que ya estarían financiándose con dinero de las drogas, lo que marcaría, para ellos, una etapa de descomposición. Su discurso, sin embargo, nos dice lo contrario. ¿A quién creerle?

Lo único cierto, los datos duros, son las informaciones anti guerrilleras que los gobiernos de Chiapas, Guerrero y Oaxaca difunden cada vez más cotidinamente.

EPR no va contra Jacobo Silva Nogales

Favor de leer la Posdata de Jorge Lofredo, investigador del Centro de Documentación de los Movimientos Armados (Cedema) sobre el comunicado del EPR, en el que desde junio de 2009 anunció su decisión de anular, en los hechos, la sentencia de muerte en contra de la dirigencia del ERPI, lo que quita sobre los recién liberados, Jacobo Silva Nogales y Gloria Arenas, la presión de que desde el bando subversivo pudiera mantenerse viva tal posibilidad.

ajimac@gmail.com

www.twitter.com/ajimac


No hay relación entre el narco y las guerrillas, asegura investigador

Redacción/SDP | 10 de Noviembre, 2009 - 09:13

http://sdpnoticias.com/sdp/contenido/nacional/2009/11/10/18/529127

No existen datos que permitan comprobar alguna relación entre el narcotráfico y la guerrilla, pues si las autoridades tuvieran datos fuertes y contundentes, ya los hubieran dado a conocer, aseveró categórico Jorge Lofredo, fundador del Centro de Documentación de los Movimientos Armados.

No existen datos que permitan comprobar alguna relación entre el narcotráfico y la guerrilla, pues si las autoridades tuvieran datos fuertes y contundentes, ya los hubieran dado a conocer, aseveró categórico Jorge Lofredo, fundador del Centro de Documentación de los Movimientos Armados.

Lo anterior, luego de que el diario Reforma diera a conocer que información documentada revela un intenso tráfico de armas en Chiapas por parte del crimen organizado.

Según una investigación oficial realizada por policías federales y estatales, detallaba el rotativo, células de grupos subversivos buscan desestabilizar al gobierno local del perredista Juan Sabines por medio de la vía armada; ello como una preparación para las celebraciones del Bicentenario de la Independencia en el 2010.

En este contexto, Lofredo sostuvo que el informe de inteligencia estatal y nacional permite inducir que ha habido una coordinación fuerte entre los grupos armados que hace mucho tiempo que están actuando de forma independiente y hasta en ciertos momentos enfrentados.

“Además también pretende inducir una relación o vínculo entre la delincuencia organizada y la guerrilla, hecho que también se ha hablado mucho desde hace mucho tiempo y que nunca se ha podido comprobar”, acotó.

Durante una plática con el periodista Carlos Puig, el especialista explicó que se puede observar cómo hay acercamientos entre los grupos guerrilleros, pero que no van por la vía de la relación con la delincuencia organizada.

Reveló que entre el Ejército Popular Revolucionario (EPR) y el Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI) apenas se están dando los primeros gestos de acercamiento, lo cual, explicó, es para saldar viejas heridas y divisiones. “Significa que todo puede llegar a buen puerto entre ellos o quedar en la nada, como muchas veces ha sucedido”, precisó.

Jorge Lofredo dijo no tener algún dato de que entre dichos grupos ya exista coordinación. “Apenas son los primeros gestos”, reiteró.

Y sobre la posibilidad de que los grupos guerrilleros decidan aprovechar la efeméride de 2010, por los festejos de Bicentenario de la Independencia y Centenario de la Revolución, Jorge Lofredo indicó que quizá pretendan hacerse presentes esas fechas tan representativas, aunque, según observaciones que ha elaborado, este tipo de movimientos no han seguido esta lógica.

En este sentido, el investigador sugirió que los grupos guerrilleros ya han roto con la efemérides, toda vez que ya no emprenden acciones en fechas que han sido importantes para estos grupos, como el 23 de septiembre, fecha clave en el movimiento subversivo porque se recuerda el asalto, en 1965, a la liga comunista 23 de septiembre.

Es decir, que lo anterior indicaría que los grupos guerrilleros se están tomando sus propios tiempos. “Quizá el 2010 no es su apuesta, quién dice que no podrían actuar en 2012”, subrayó.