Sigue hostigamiento contra Hernández Yuena

Fredy Martín Pérez

http://diariomeridiano90.blogspot.com/

Comitán, Chis; 7 de junio.- Un año después de la detención del maestro Francisco Hernández Yuena, acusado formar parte del Ejército Popular Revolucionario (EPR), el hostigamiento y persecución en su contra aun persiste y por lo mismo, solicitó la intervención de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Integrante del Comité de Campesinos Pobres (CCP), Hernández Yuena, profesor de primaria fue detenido a las 12:30 horas, del 5 de febrero del 2008, cuando retornaba de una marcha en Tuxtla Gutiérrez, con contra de la cláusula agropecuaria del Tratado de Libre Comercio (TLC).

La detención ocurrió en una de las calles principales de Venustiano Carranza, cerca de una institución bancaria por al menos 15 agentes de la “policía judicial”.

Desde el momento de su captura, Hernández Yuena fue sometido por su captores, que no presentaron ninguna orden de arresto, a tortura física y psicológica, incluso su menor hijo Pavel Santiago Hernández, entonces de seis años, sufrió amenazas.

La Organización Mundial Contra la Tortura (OMCT) recibió la queja Caso MEX 140208, interpuesta por un grupo de juristas del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas, que asisten al profesor.

En los dos lugares donde permanecía detenido Hernández Yuena, sus captores le hacía preguntas frecuentes sobre la presencia del EPR en Venustiano Carranza, pero al negarse, los golpes se convirtieron en “más fuertes”.

A más de un año del incidente, Hernández Yuena dice que continuar el hostigamiento y persecución en su contra, incluso, en días pasados, un presunto comandante de la policía identificado como Roberto “N”, se plantó frente a él, para decirle que le “ayudaría”, que “confiara”, porque “todo iba a salir bien”.

-¿Qué ha pasado a más de un año de la detención?

-Nos hemos dado cuenta que ahora ya cambiaron el expediente y ahora me acusan del delito de despojo, aun cuando me detuvieron me responsabilizaban de encabezar la marcha del 31 de enero, para pedir precios justos para la tonelada de maíz.

-¿Qué ha pasado ahora con su vida?

-Hace una semana llegó un comandante a buscarme y después de averiguar la situación vimos que es irregular, es ilegal… que un comandante que dice ser encargado de Servicios Internos. Es ilegal, porque un ministerio público me puede solicitar informes. El comandante se llama Roberto.

-Entonces no hay ningún avance.

-No hay ningún avance. Sigue habiendo intimidación, vigilancia, en la casa, en la calle. Es notorio, no es diario, en ciertos días, en ciertas ocasiones, pues aparece gente extraña. Ese comandante llegó cuando iniciamos la huelga de hambre por la libertad de presos políticos.

-Ahora la acusación se cambió por otro delito?

-Así es. Dicen que la acusación, con la que me permiten librarme judicialmente del delito es por el delito de despojo. El supuesto acusador dice que yo intenté despojarlo de un terreno, del que no dice el lugar, ni nombre, pero que se sabe que está entre Venustiano Carranza y Laja Tendida. Que me vio con 30 personas y que lo íbamos a invadir. Como no existe esa acción, no procedió y no se consume el delito.

-De la queja ante la Organización Mundial Contra la Tortura, ¿qué avances hay?

-No hay ningún avance de la parte oficial. No hay respuesta y ningún avance. Hemos estado atendido el problema de manera sistemática. La Comisión Estatal de Derechos Humanos por su propia iniciativa intervino y ellos proponían llegar a un acuerdo, con el gobierno y yo nunca me presenté, porque nunca solicité su intervención.

-¿Qué sigue ahora?

-Lo que sigue ahora, es turnar el caso ante la Fiscalía de Derechos Humanos y organismos de derechos humanos, porque se habla de un delito de tortura y la tortura es condenada, porque a mi me torturaron física y moralmente a mi y a mi hijo (Pavel) que en ese entonces tenía seis años.

-Concretamente ¿qué pide?

-Estamos pidiendo castigo por el delito de tortura, porque me torturaron físicamente a mi y psicológicamente al niño. Estamos solicitando la intervención de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Organización Mundial Contra la Tortura, me hizo una segunda entrevista para darle seguimiento al problema y elevar la protesta a nivel internacional.