Roberto García Rivas y Roberto Méndez Gómez, muestran un mapa hecho por miembros del grupo paramilitar que dice se enfrentó a zapatistas aquella mañana del 22 de diciembre de 1997, pero que nunca ejecutó a los 45 indígenas masacrados. Ambos estuvieron presos varios años en Cerro Hueco, pero fueron liberador al cumplir su corta sentencia de prisión.