Un extranjero muero y cinco graves

Fredy Martín Pérez

Comitán, Chis; 18 de septiembre.- Presuntos policías estatales atacaron a tiros a un grupo de inmigrantes de El Salvador y Ecuador, durante una persecución que se realizó por varios kilómetros y que se saldó con un muerto y cuatro heridos graves.

Según el ecuatoriano Miguel Mallén, del departamento de Cañar, seis extranjeros viajaban en una camioneta Dodge, tipo Ram, de color blanco, con placas DB 422711, del estado de Chiapas, que era conducida por un traficante de humanos.

En un trayecto de una carretera, que el extranjero no conoce, un grupo de presuntos policías ordenó al pollero: “¡Alto!”, “¡Deténgase!”, pero éste no obedeció y aumentó la velocidad.

Así, se realizó la persecución y durante un trayecto de varios kilómetros, los extranjeros fueron baleados de manera indiscriminada, por el grupo de atacantes.

Como resultado, un extranjero del que se desconoce su nacionalidad perdió la vida y un traficante de humanos, resultó gravemente herido, al recibir un disparo de fusil, en la lado derecho de la espalda.

El pollero, al parecer de la región, fue encontrado a unos 300 metros, de donde quedó abandonada la camioneta en la que transportaba los indocumentados, prácticamente con las llantas averiadas por los disparos de alto poder.

Cuando socorristas de Protección Civil llegaron al lugar donde estaba el traficante, ya no podía articular palabras.

El hombre de unos 40 años, se encontraba sentado y con la ropa teñida en sangre.

Un extranjero regordete y de unos 32 años de edad, perdió la vida al recibir un disparo en la sien izquierda. Su rostro quedó completamente ensangrentado.

Los inmigrantes sobrevivientes tenían disparos en la boca, en la piernas, en la mano, cabeza y espalda.

Los extranjeros dijeron que cuando se realizó la persecución y el ataque a balazos se tiraron en la plataforma de la camioneta, por lo que no pudieron distinguir los vehículos que los perseguían.

Gustavo Mallen Cela, de 25 años, de Ecuador, tenía una herida de bala en el brazo y en la espalda a la altura del pulmón izquierdo.

Fredy Enrique Mancilla, de 33 años, de El Salvador, aseguró que por el miedo no pudo conocer el color de los uniformes de los agentes que los perseguían. “No sé, no me di cuenta”, dijo.

Edgar Cancea Zúñiga, de 33 años, de Ecuador recibió un disparo en la espinilla, que le provoco una fractura expuesta de tibia y peroné.

Un agente del Ministerio Público llegó al lugar para dar fe de los hechos y abrir una averiguación previa por el delito de homicidio y los que resulten.